La jueza María Eugenia Capuchetti ingresó minutos antes de las 11 al edificio donde vive la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, con el objetivo de tomarle declaración como testigo, tras el intento de asesinato que sufrió anoche mientras ingresaba a su vivienda en el barrio porteño de Recoleta.

Acompañada por el fiscal Carlos Rívolo, la magistrada ingresó al edificio ubicado en Juncal y Uruguay. Más temprano, la jueza había visitado la zona donde ocurrió el intento de magnicidio por parte de un hombre que ya se encuentra detenido.

Foto Victoria Egurza

Las declaraciones de los testigos

Al menos ocho personas que se manifestaron la noche del jueves frente a la casa de Cristina ya prestaron declaración como testigos ante la jueza federal Maria Eugenia Capuchetti por el ataque a la Vicepresidenta, en tanto el hecho se investiga como “homicidio calificado en grado de tentativa”.

Los testigos declararon durante la madrugada y hasta primera hora de la mañana y, en muchos casos, fueron trasladados a Comodoro Py 2002 desde el lugar de los hechos. También se tomaba declaración a custodios de la Vicepresidenta y efectivos de Policía Federal, informaron a Télam fuentes judiciales.

Un dirigente de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que presenció el atentado afirmó que tras el ataque “muy poca gente se dio cuenta de que había un arma”.

Se trata de José Testoni, secretario general de la CTA de Santa Fe, quien anoche pasó “por la casa de Cristina para apoyarla en la guerra judicial que afronta” y fue testigo del ataque.

“Yo estaba casi al final del cordón, a diez metros de donde pasó el hecho. Pasa (Cristina) al lado mío y me da la mano. Le dije ‘soy de Santa Fe, vengo al encuentro de la CTA’, a lo que ella me respondió: ‘Ah, qué bueno, Santa Fe”.

Foto Victoria Egurza

En declaraciones a radio Aire de Santa Fe, el dirigente gremial añadió que, “a los diez segundos, se armó un tumulto, y la verdad lo que se dijo en ese momento fue que se trataba de un infiltrado”.

Testoni dijo que luego del atentado “la gente seguía en un clima festivo” y añadió que cree que “los custodios no sabían que tenían un arma cuando lo fueron a aislar, porque después lo entregaron a la policía, y ahí siguió todo de manera normal”.

“Muy poca gente se dio cuenta de que había un arma en el lugar, si hubiera habido conciencia de eso, las cosas no hubieran seguido igual”, continuó.

En tanto, en la sede del juzgado ubicado en el tercer piso de Comodoro Py 2002 comenzó además a peritarse el teléfono celular del detenido y se analizaban todos sus mensajes y comunicaciones.

El acusado prestará declaración indagatoria una vez que el juzgado cuente con los resultados de todas las medidas de prueba dispuestas, que incluyeron un allanamiento a su domicilio y otros lugares de interés para la causa.

Foto Victoria Egurza

El acusado, identificado como Fernando André Sabaj Montiel, fue sometido ya al examen médico legista que determinó que, en principio, estaría en condiciones de ser indagado patrocinado por un defensor oficial.

La entrada del juzgado de Capuchetti permanecía bajo custodia policial mientras la magistrada estaba reunida con los dos fiscales que trabajan en el caso, Carlos Rívolo y Eduardo Taiano.

Los tres realizaron poco antes de las 7 una inspección ocular en el lugar de los hechos y luego regresaron a los tribunales federales.

Uno de los testigos del hecho -llamado Javier- declaró que el hombre detenido -Fernando André Sabag Montiel, un ciudadano brasileño de 35 años- llegó a “gatillar dos veces” a escasos centímetros de la cabeza de la Vicepresidenta.

Foto Victoria Egurza

En declaraciones a la prensa en Tribunales luego de declarar en el juzgado, el testigo contó que “estaba formando parte del cordón” de militantes.

“Cristina viene hacia a mí, me acaricia y por la altura de arriba de mi hombro, veo que se asoma un brazo con un arma. Veo la figura del arma, pero no logro ver qué arma era. Retrocede y ahí yo me doy vuelta y lo agarro”, relató.

Al ser consulado sobre si el detenido le dijo alguna frase a la Vicepresidenta, contestó: “No escuché nada. Pero sí se escuchó que gatilló. Para mí, gatilló dos veces”.

Y luego relató: “No sé si Cristina se dio cuenta porque justo me doy vuelta porque veo el arma, giro hacia la derecha y lo agarro junto a otra gente. Varias personas se sumaron para agarrarlo porque en la vereda había varios. Lo agarramos y le decimos: ‘vos tenes un arma’ y él decía ‘no, no’; entonces lo tanteamos un poco y se le cayó el arma”.

“Apenas vemos que cae el arma, parte de los organizadores –del operativo militante de protección de la Vicepresidenta- se lo llevan mientras un hombre pisa el arma y la retiene allí”, explicó.

El detenido pasó la noche alojado en una dependencia de la Policía Federal ubicada en la calle Cavia 3350, del barrio porteño de Palermo.

Foto Vctor Carreira

Cruces de llamadas y allanamientos

La jueza ordenó la madrugada de este viernes allanamientos, cruces de llamados entre la línea telefónica del detenido y otros, además de la pericia sobre su teléfono.

En el marco de las actuaciones, también fue allanado el domicilio del detenido, ubicado en el barrio porteño de Villa del Parque, en la calle Terrada al 2300.