En una entrevista con Andrés Oppenheimer en CNN, Milei lamentó haber mantenido una postura de transparencia y honestidad al tratar con los gobernadores, calificándolo como su mayor error. En sus propias palabras, expresó: «Los gobernadores, en lugar de tomarlo como un gesto de buena voluntad, que es lo que era, lo tomaron como un signo de debilidad». Esta autocrítica parece no considerar la complejidad de las relaciones políticas y la necesidad de construir consensos.
Además, Milei criticó a la «casta» política por su resistencia a renunciar a privilegios, sin reconocer la importancia del diálogo y la negociación en un sistema democrático. En sus declaraciones, denotó una falta de compromiso con la construcción de consensos y una tendencia a la confrontación en lugar de la colaboración: «El problema es que la casta no quiere dejar los privilegios», resaltó.