Con la culminación del verano, la Municipalidad de Florencio Varela prosigue con su estrategia de concientizar a la comunidad con la informaciòn necesaria en viviendas, instituciones y comercios a fin de evitar ingresos a los espejos de agua denominados tosqueras.

«Ejecutamos una labor casa por casa, con folletería y difusión. Sobre todo, en las inmediaciones de la cava ubicada en la zona», remarca el subsecretario de Gestión y Articulación Territorial Ambiental, Jorge Flores. «Por otra parte, colocamos cartelería en el área involucrada», aclara.

«Asimismo, promovemos talleres en diferentes establecimientos educativos donde charlamos con los niños y las niñas sobre los riesgos de su uso con fines recreativos. Ponemos especial atención en las infancias para explicarles que, a pesar de sus características, al meterse o intentar nadar pueden perder la vida», agrega.

Además de encontrarse estas tosqueras en predios privados, la prohibición del acceso a estos espacios tiene que ver con que, pese a tener aspecto de laguna calma, son verdaderas trampas mortales.

Con cambios abruptos en su nivel, tienen un suelo arcilloso que dificulta hacer pie. Sin un fondo firme, sus bordes resultan resbaladizos e imposibles de sostener peso como los de una persona. En sus puntos más profundos no solo presentan corrientes horizontales propias de la napa, sino también peligrosos remolinos (movimiento vertical de la masa hídrica) generados en las diferencias térmicas.